O cómo romper cánones con un beso

El Centro de Artes Digitales Ideal de Barcelona nos ofrece una exposición inmersiva sobre Gustav Klimt. Un genio, adelantado a su época, que supo plasmar los inicios del movimiento Secesionista o Modernista, así como el feminismo de la Viena de finales del siglo XIX. Imposible no emocionarse con las proyecciones de obras como ‘Judith I’, ‘Medecine’, ‘Dánae’ o ‘El Beso’ sobre más de 1.000 m2 de pantalla.
Decía el gran Gustav Klimt: “Quien quiera saber algo de mí, que observe mis cuadros con atención. Que busque en ellos quién soy y qué quiero”. Y tenía razón. Cuando analizamos la obra del artista austríaco vemos un salto evolutivo enorme. Klimt supo pasar del estilo clásico y académico de sus inicios al más rompedor de su ‘época dorada’, inspirada en la civilización bizantina. De pintar murales para el Museo de Historia del Arte de Viena, a fundar el movimiento Secesionista (Secession) en el año 1897.
Aidoo entiende sus retratos como un homenaje a todas las personas que le fascinan y cuya memoria no quiere que se pierda. El hecho de que se trate sobre todo de personas negras tendrá que ver con su propio color de piel y el origen de sus padres,
El objetivo de esta corriente artística era buscar formas de expresión nuevas que representaran la vida moderna. Viena era una de las ciudades más avanzadas de finales del siglo XIX. Cuando uno alzaba la vista al cielo podía ver dirigibles, surcando los cielos. O se podía subir a la noria del parque de atracciones Prater, considerada la más grande de Europa…
Por Anna León
IDEAL Centre d’Arts Digitals
Doctor Trueta, 196-198 (Barcelona)